Nos engañan como a…

Probablemente el famoso dicho de «nos engañan como a chinos» haya que cambiarlo en un breve periodo de tiempo si la Real Academia Española -por supuesto, de la lengua- quiere ser fiel a la realidad.

Y no es que ya no existan engaños en el mundo, no ¡claro que no! El problema radica en la última palabra. Puede que China y sus habitantes sea un lugar muy socorrido para estas expresiones por su lejanía con los países de habla castellana. Y, pues eso, como no hay muestra de lo contrario decimos China (o chinos).

¡Pero ojo! Señores españoles. ¿No sería más correcto decir: «nos engañan como a españoles«? Se vienen muchos ejemplos a la mente, desde la final de Copa del año pasado en donde se silenciaron dos minutos que no interesaban hasta la famosa gripe aviar que iba a acabar con todos nosotros. Y muchos otros, está claro que no todos afectan solo a España (como la gripe aviar) porque si no ya sería patético. Pero hay uno que afecta de una forma muy grave, me refiero a la telefonía móvil.  ¿Cómo puede ser que mandar un mensaje dentro de España (entre Belchite y Alcalá de Henares, p.ej.)  sea más caro que hacerlo desde una compañía finesa a España?

Es algo incocebible. Siendo que Finlandia es un país más caro en general, y con unos sueldos muy superiores a los españoles. En Finlandia no existe establecimiento de llamada, si tu hablas 20 segundos te cobran por esos segundos y no por un minuto, si envías un mensaje es el mismo coste a cualquier lugar (0.07€), etc. Ya no voy a entrar a hablar de internet porque decididamente «nos engañan como a españoles«…